sábado, 21 de marzo de 2009

Sigue el sol y el cielo azul pero con un bajón de 10º en la temperatura. Es que ayer, anteayer, el otro... estábamos a 27º.

Y hoy por la mañana me llevé una sorpresa. Apareció en la tienda un buen amigo que vive en Madrid. Entró en la tienda con la cara tapada con el periódico y mi sorpresa fue grande y muy agradable. Lo conozco desde los 19 años. Vivía en el mismo Colegio Mayor en que vivía mi novio de entonces. Y empezamos a recordar cosas y nos reímos un montón, a carcajadas. Empezamos a hablar de todos los amigos de aquella época y de uno en especial, por lo simpático que era. Le llamábamos "el chingao" porque su expresión típica era: "estoy chingao". Era mejicano. Yo lo conocí así: al salir de la facultad me acercaba algunos días hasta el Colegio y ese día, muerta de hambre, me metí en la cafetería y pedí un bocadillo de salchichas con mostaza, sin bebida. Estaba comiéndome el primer "bocado" y oigo: "bebase usted algo, que se le va a atascar el gañote". A ver... os tenéis que imaginar el acentillo mejicano tan simpático y tan bonito. Y claro... es una guarrada decirlo pero de la carcajada me salieron las salchichas por un lado... el pan por el otro... Desde entonces ya empecé a tener amistad con él y en cantidad de ocasiones me reí muchísimo. Tengo que reconocer que era muy simpático.

Y hoy mi amigo de Madrid me recordó otro detalle que se me había olvidado: el Colegio tenía su equipo de fútbol y hacían campeonatos con otros Colegios y una de las veces el portero de su equipo enfermó y urgentemente empezaron a buscar un suplente. Y éste, el chingao, les dijo: No os preocupéis... yo juego en su lugar. ¿Pero sabes hacer de portero?. Siiii, si yo siempre jubada de portero en mi equipo y se me daba muy bien. Pues venga... vístete que dentro de una hora tenemos que jugar el partido. Y allí se fueron tan contentos... a jugar. Otra cosa es como volvieron. ¡LES METIERON QUINCE GOLES!. El pitorreo que se organizó contra el chingao fue enorme y yo recuerdo como se defendía: "La culpa la tienen ustedes por no haberme probado", "y además paré uno", "y ustedes son unos matados porque todo el rato los tenía en la portería y no daba abasto". Entre ese acento tan bonito y lo simpático que era decidieron dejarlo por imposible y lo gracioso es que se "metió a todos en el bolsillo". Tengo un buen recuerdo de ese hombre y no sé qué será de su vida, pero me gustaría volver a encontrarlo. Muchas... muchas carcajadas me hizo "soltar". Era buena gente y muy simpático.

Y me reí... me reí mucho recordando muchas cosas. Lo del bocadillo de salchichas todavía me hace reír cuando lo recuerdo, aunque esté sola. Me río yo sola. Es que una cosa es contarlo, que no tiene tanta gracia, y otra cosa es "vivirlo".

Y ahora voy a buscar una canción: hoy tengo claro que son The Beatles. La voy a buscar.

Besiños con sol.

CHELIS


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